¿Conocéis realmente la utilidad y la importancia del descubrimiento de este material? El grafeno es una estructura laminar plana, de un átomo de grosor, compuesta por átomos de carbono densamente empaquetados en una red cristalina en forma de panal de abeja. Los descubridores de este material han recibido el premio nobel de física en el pasado año. Lo descubrieron dos investigadores rusos llamados Konstantin Novoselov y Andre Geim, que trabajan en la universidad de Manchester. Estos científicos afirman que este descubrimiento probablemente será una revolución en el campo de la informática principalmente. Se espera que la famosa multinacional, Samsung, colaborando con la universidad de Sungkyunkwa de Corea del Sur saque al mercado las primeras pantallas enrollables, táctiles y con circuitos invisibles. El material que se usa normalmente para esta tecnología es el Silicio, pero ya se sabe que el Grafeno tiene una mayor conductividad al dejar pasar todos los electrones, mientras que el antíguo material al ser semiconductor, solamente permite transmitir corriente cuando se le indica.
Este nuevo material supondrá una gran ventaja y éxito ya que es mucho más manejable, al ser enrollable, más resistente y menos costoso.Ciertas compañías como Apple, los famosos netbook y las mejores pantallas de televisión utilizarán este material. El principal obstáculo es la fabricación en grandes cantidades de este material, pero, de conseguirse, su fabricación promete ser de bajo coste e impacto ecológico. Al ser tan buen conductor, el grafeno pierde menos energía y eso provoca que los circuitos duren más y consuman menos. Está compuesto unicamente por carbono, que se encuentra en abundancia en cualquier parte del mundo.
Su uso podría permitir suprimir otros materiales del mercado que son más caros y contaminantes como algunos óxidos con los que se fabrican la mayoría de las aplicaciones electrónicas transparentes. Para más información, dejamos un video aquí.
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miércoles, 23 de marzo de 2011
miércoles, 2 de marzo de 2011
Nanobots
Para realizar tareas complejas a una escala microscópica, los investigadores del instituto de tecnología de California han conseguido construir y programar dos "robots moleculares" a los cuales se les ha inyectado ADN.
El primero de los nanobots tiene forma de araña y se puede programar incluso para que tome decisiones por si mismo. Este pequeño robot es capaz de dividir secuencias genéticas gracias a que sus patas son enzimas de ADN. También es capaz de recrear o dividir cadenas de material genético.
El segundo nanorobot es una especie de cadena de montaje, que se puede deslizar fácilmente por las cadenas de ADN gracias a sus cuatro patas y sus tres manos. Tiene un tamaño muy pequeño, tan sólo unos nanómetros, que son una milmillonésima parte de un metro. Este pequeño robot está diseñado para ensamblar cualquier tipo de materiales, incluso los artificiales.
A partir de estos microbots de ADN se podría llegar a la creación de legiones de estos, formando una fábrica en potencia de cualquier dispositivo. Serían capaces de fabricar nuevos materiales que hasta ahora sólo se habían soñado.
Los nanobots podrían repararse o reconstruirse a sí mismos, o decidir si la célula que tienen enfrente es cancerosa y debe por tanto ser destruida.
Otras aplicaciones posibles según la programación de estos seres podría ser mantener en forma a una persona que lo necesite, como por ejemplo, a un astronauta o en el caso de que fuese un grupo de robots, podrían combatir un tumor.
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El primero de los nanobots tiene forma de araña y se puede programar incluso para que tome decisiones por si mismo. Este pequeño robot es capaz de dividir secuencias genéticas gracias a que sus patas son enzimas de ADN. También es capaz de recrear o dividir cadenas de material genético.
El segundo nanorobot es una especie de cadena de montaje, que se puede deslizar fácilmente por las cadenas de ADN gracias a sus cuatro patas y sus tres manos. Tiene un tamaño muy pequeño, tan sólo unos nanómetros, que son una milmillonésima parte de un metro. Este pequeño robot está diseñado para ensamblar cualquier tipo de materiales, incluso los artificiales.
A partir de estos microbots de ADN se podría llegar a la creación de legiones de estos, formando una fábrica en potencia de cualquier dispositivo. Serían capaces de fabricar nuevos materiales que hasta ahora sólo se habían soñado.
Los nanobots podrían repararse o reconstruirse a sí mismos, o decidir si la célula que tienen enfrente es cancerosa y debe por tanto ser destruida.
Otras aplicaciones posibles según la programación de estos seres podría ser mantener en forma a una persona que lo necesite, como por ejemplo, a un astronauta o en el caso de que fuese un grupo de robots, podrían combatir un tumor.
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